The Crucified Messiah

The Death and Exaltation of Jesus are inextricably linked in the Book of Revelation . The Book’s visions unveil the plan to redeem humanity. His sacrificial death, resurrection, and enthronement put it into action. However, he is no tyrant . He does not subjugate his enemies through force or violence. Instead, he “ shepherds the nations ” and purchases men from every “ tribe and people and tongue ” through his shed blood.

La introducción al Evangelio de Mateo declara que Jesús es el “ Hijo de Abraham ”, el descendiente destinado a cumplir las promesas del pacto hechas por Dios al Patriarca. Su identificación como el hijo de Abraham en Mateo enfatiza el tema del cumplimiento. A través de Jesús, las promesas se hacen realidad.

El ángel le informó a José que el niño llevado por María era “ engendrado por el Espíritu Santo ”, y se le instruyó que llamara al niño ‘ Jesús ’: “ Llámalo Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados .” Este nombre señalaba el acto salvador de Dios para Su pueblo que Él estaba a punto de revelar. La Salvación y el Salvador prometidos a Israel y a las naciones habían llegado. ¡” Buenas noticias” de hecho !

Después de su resurrección, Jesús declaró: “ ¡Se me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra, por lo tanto, ve y haz discípulos de todas las naciones! ” Luego envió a sus discípulos a anunciar su Señorío y salvación hasta los “ confines de la Tierra .” La Era de la Salvación comenzó con su Muerte y Resurrección; por lo tanto, su mensaje vivificante debe ser anunciado a la humanidad.

Foundational to the Letter to the Hebrews is the appointment of Jesus as our High Priest. This was due especially to his obedience “ unto death ” whereby he achieved the “ purification of sins .” In his sufferings, he was “ perfected .” God vindicated his sacrifice by resurrecting and seating him at the “ right hand of the Majesty on High ” where he now intercedes for us.

Jesus is revealed as the Savior of Mankind in his sufferings and self-sacrificial death for others, including his enemies . The inability of men to recognize Jesus as the Son of God until after his crucifixion is a central theme of the  Gospel of Mark . Ironically, the first man to do so is the Roman centurion on duty at his execution. His self-identification as the suffering “ Son of Man ” made him unrecognizable to unregenerate men.  He was the Savior no one expected or wanted .